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El grifo extraíble encajará perfectamente en cualquier cocina, ya sea en su hogar o con fines comerciales.

El potente ozono desinfectante es capaz de ayudarlo a detener la propagación de bacterias y virus, y eliminar pesticidas dañinos de los alimentos.

Es importante que el grifo esté hecho de acero inoxidable para evitar que el ozono tenga reacciones químicas con el material.

¿Por qué aplicamos ozono al grifo de acero inoxidable?

Debido a que podemos encontrar cloro en el agua del grifo, se ha informado que el agua del grifo con un contenido de cloro de 0.5 ppm puede ser utilizada para matar bacterias y eliminar pesticidas. Sin embargo, estos informes no mencionan que para lograr dicho resultado, la temperatura del agua debe estar por debajo de los 41 grados Fahrenheit (5 grados Celsius). El cloro se evaporará a temperaturas más altas, lo que hará que el agua del grifo no pueda eliminar los pesticidas y matar las bacterias. Es extremadamente difícil (y incómodo) para el usuario promedio usar agua por debajo de los 41 grados para lavar alimentos.

El ozono es una combinación de 3 átomos. Cuando uno de los átomos se libera, ocurre una reacción química en materia orgánica que puede:

• Matar Escherichia coli (E. coli), Mycobacterium tuberculosis, Enteropatógenos y Shigella dysenteriae que existen en el aire y el agua.
• Mantener frescos los pescados y la carne.
• Descomponer residuos de agroquímicos en frutas y verduras.
• Descomponer el cloruro encontrado en el agua del grifo.
• Desodorizar cocinas y baños.
• Limpiar aguas residuales contaminadas.